CARTA ROTARIA No. 214 Marzo 29 de 2017

ENTRE TANTO

Nos preparamos para la Asamblea de rigor de nuestra Fundación, tuvimos la suerte junto con Eugenia de Barrera, Martha Jaimes y Carlos Santander de ser invitados por el compañero Pedro Ramírez, quien no ahorró detalles para hacernos pasar unos momentos agradables no solo al paladar sino además para el órgano de la audición con excelente música,  acompañados de sus  anotaciones de todos los talantes sobres su vida, que sufrió los rigores inmerecidos de la lucha política en su pueblo  a la cual afortunadamente sobrevivió, su difícil época de estudiante  y los sinsabores que a veces suele traer el ejercicio honesto de  la profesión, lo cual conocimos narrado de una manera espontánea y sencilla como lo es él, por ello hacemos un público reconocimiento a su papel protagónico en esa velada.  No siempre se requiere hablar de rotarismo, responsable de esta actividad que nos une,  para reconocer que pertenecemos a esta grandiosa organización, como muchos otros sentimientos que guardamos y salen a relucir cuando se precisa.

NUESTRA FUNDACIÓN

Si se tuviera a la mano un inventario de las obras a las cuales ha colaborado, seguramente sería un motivo más de orgullo para quienes pertenecemos a ella y de una u otra manera hemos ayudado  a su fortalecimiento, .en diversos grados y lo loable sería que pudiésemos seguir haciéndolo , pero nadie puede negar que los tiempos han cambiado, hay más clubes de servicio como el nuestro en la comunidad y organizaciones similares –fundaciones, ONG, Asociaciones- que forman un grande grupo de voluntariado  con las cuales hay que compartir, el cada vez más  el reducido número de personas altruistas; sin embargo no hay que olvidar que “ de pequeños actos pueden derivar cosas grandes”  lo cual debe movernos  a que el dinamismo caracterice y acreciente    a nuestra Fundación y nos animemos a emprender nuevas obras para dar cumplimiento a los objetivos que tuvieron en mente quienes la crearon hace ya varias décadas.